Es una nueva versión de Rancho, su elogiada obra, con actores locales.
CORDOBA.- Julio Chávez asegura que es una «sorpresa» encontrarse dirigiendo su obra teatral Rancho en Córdoba con actores locales. «Soy bastante quedadito -se describe-, poco aventurero. Nunca he dirigido grupos que no haya preparado yo y además soy reacio a la ‘extranjería’, soy muy respetuoso de lo local. Pero Rancho nació con tonada cordobesa y acá estamos». La obra se estrenará el 5 de julio en el Teatro Real y es una coproducción de Maxi Pita y la Agencia Córdoba Cultura. El elenco está integrado por Trinidad Vassia, Lucía Nocioni y Raúl Sánchez.
Para Chávez, esta reposición -que ya se hizo en teatro y en cine como Rancho aparte- es «como un hijo de la madurez». Surgió porque Pita le pidió una obra para hacer con un elenco local y él, «inesperadamente», le ofreció Rancho, pero con la idea de dirigirla él. «Cuando se lo contaba a conocidos, a amigos, se sorprendían porque soy cauteloso y no dirijo grupos que no armo. La verdad es un hecho poco reconocible en mi agenda. Estoy expectante».
La obra cuenta la historia de Clara, una mujer nacida en el campo que vive en Buenos Aires en un departamento y que después de muchos años de distanciamiento recibe de manera imprevista a su hermano Tulio y a su sobrina Susana, hija de su hermana menor. Terminan ahí porque perdieron el rancho que tenían en el campo. «Es un boceto pequeño, una linda partitura musical que se va vinculando; tiene una estrategia musical encubierta», describe Chávez, quien recuerda que la vendió para el cine, pero no quiso participar porque no compartía la idea de hacer exteriores; él quería jugar con la idea de «cómo aparece el campo en una habitación porteña burguesa».
De las audiciones participaron 350 actores y él participó de la última selección. Vassia, quien será Susana, viene del teatro independiente y asegura que hasta ahora la experiencia superó todas las expectativas. «Chávez es palabras mayores; es un honor y quiero sacarle el jugo a la experiencia. Hay gente en Buenos Aires que lleva años trabajando para tratar de conseguir algo así y a mí se me dio en Córdoba, en mi ciudad».
Sánchez es Tulio; ya conocía la obra y le gustaba. «Todavía no lo puedo creer, vivo del teatro y hace 15 años que estoy en la Comedia Cordobesa; he trabajado con Pepe Soriano, con Víctor Laplace, pero que se dé esta posibilidad es enorme. A Julio lo considero un gran actor, un maestro, y compartir este proceso es muy interesante», señala. Nocioni también es actriz de la Comedia Cordobesa y será Clara; para ella, el material es «soñado, un libro hermoso, y la mirada de Chávez es mucho más que un plus, es la cabeza de todo».
Chávez -quien ya estuvo un par de veces en esta ciudad y ya se instaló hasta el estreno- admite que la obra tiene «tonada cordobesa» porque uno de los actores con los que construyó Rancho es nacido aquí: Leandro Castello, quien ahora vive y trabaja en Miami. La casa precaria que deja de existir estaba en Calchín, un pueblo a unos 110 kilómetros de la capital provincial. Pita se entusiasma con que toda la producción sea local; la obra estará tres meses en cartel y el cuarto mes se lo ceden a Córdoba Cultura para que la lleve de gira por el interior.
Apenas finalizada la grabación de El Tigre Verón (miniserie coproducida por Pol-ka, Turner Broadcasting System, Eltrece y Cablevisión, que emitirán el 13 y la cadena TNT), Chávez llegó para compartir la lectura del libro con los actores. «No tengo la vaca atada -apunta a LA NACION-, me gusta construir un vínculo con los actores y en eso esta experiencia es desafiante, porque el tiempo es corto; soy un director con una mirada porque conozco la partitura, no la abro para que los actores hagan aportes. Esta es una reposición, no es creación».
Reconoce la actitud de los actores dispuestos a trabajar en estas condiciones porque «parte del oficio es expresar, aportar» y advierte que «seguramente algún condimento propio podrán poner, siempre que su orégano no tape el sabor de mi lomo».
Gabriela Origlia. 19 de junio de 2019
LA NACION