El actor habló con Cadena 3 sobre su experiencia en la adaptación teatral. Confesó que no vio la película para evitar influencias y detalló cómo logró la interpretación de «Charlie».
El reconocido actor Julio Chávez se encuentra en el centro de la escena teatral con su interpretación de «Charlie» en la adaptación local de «La Ballena», la obra de Samuel D. Hunter que se originó en el teatro antes de su exitosa versión cinematográfica.
En una entrevista con Cadena 3, Chávez compartió detalles sobre este desafío importante en su carrera, el proceso detrás de su transformación física y su conexión con el personaje, además de reflexionar sobre la fama y la convivencia en la sociedad actual.
«Es una hermosísima obra de teatro con una apuesta complicada», afirmó Chávez. El personaje de Charlie, un hombre con obesidad mórbida que enfrenta su despedida del mundo mientras intenta reparar errores del pasado, requiere una transformación física que lleva dos horas de preparación y 45 minutos para desmontar.
«Hay que construir la ilusión de ese cuerpo, pero la obra no se trata de la obesidad, sino de la experiencia humana», explicó. El actor destacó que el objetivo es trascender lo físico para contar «un cuentito» sobre los conflictos de Charlie con su hija, su amiga, un religioso y su exmujer.
Chávez, quien decidió no ver la película para evitar influencias, aseguró que la obra está diseñada para el teatro. «Nosotros mostramos la situación física al comienzo, pero luego nos enfocamos en el conflicto humano», señaló. El estreno, el pasado jueves en el Paseo de la Plaza de Buenos Aires, fue un éxito: «El primer fin de semana fue más que promisorio, estoy muy contento», celebró.
El actor también destacó el trabajo en equipo y la complicidad del público: «El espectador completa el relato. Si no tiene ganas de que le cuenten un cuentito, no entra».
Sobre su decisión de aceptar el proyecto, Chávez relató que el productor Ricky Pashkus le propuso la obra mientras trabajaba en Lo Sagrado. «Leí el libro y dije: sí, lo quiero hacer. No me importa que exista la película», afirmó, celebrando la oportunidad de combinar una experiencia comercial con un relato profundo.
En un plano más filosófico, Chávez se refirió a la humanidad de Charlie: «Lo comprendo y lo defiendo absolutamente. Es un ser humano que convive con otros, y eso implica fallas, daños y momentos felices. Nos dañamos porque amamos, porque tenemos ética, porque vivimos en sociedad».
Para el actor, la obra no se centra en la condición física del personaje, sino en su experiencia de vida, buscando que el público se conecte con su humanidad.
En otro plano y consultado sobre cómo maneja la fama y las demandas del público, como el reciente caso de Natalia Oreiro en San Telmo, Chávez reflexionó: «No puedo tener los beneficios de mi oficio sin las obligaciones. A veces no estoy de humor, pero comprendo que es un rol».
Relató una anécdota en un restaurante, donde un hombre alcoholizado le exigió una foto de manera irrespetuosa, a lo que respondió con firmeza pero con respeto. «Hay días, momentos y maneras. A veces encontrás a alguien guarango, pero son roles sociales, como le pasa a un cajero de banco que está atendiendo. Somos seres humanos con un rol, pero a veces nos cuesta entender eso», comparó.
Finalmente, Chávez hizo un llamado a la reflexión sobre la convivencia: «La existencia es difícil, la humanidad enfrenta amenazas grandes. Si estos conflictos menores, como una foto, son los problemas, estamos ocupando espacio con bronca. Deberíamos corregir eso, porque la convivencia es complicada, pero estos temas duran un segundo», concluyó.
«La Ballena», todos los jueves, viernes, sábados y domingos, en el Paseo La Plaza de Buenos Aires. Las entradas pueden adquirirse haciendo clic acá.
CADENA3
07/05/2025