Sobre la vida… y el arte. Intenso espectáculo de John Logan con un destacado trabajo actoral de Julio Chávez, como el pintor Mark Rothko, acompañado en escena por Gerardo Otero, ambos bajo la dirección de Daniel Barone. Critica de Martin Dichiera
Un cuadro vive por compañerismo y se expande y aviva a los ojos de un observador sensible. Muere por la misma razón. Por lo tanto, es un acto arriesgado e insensible sacarlo al mundo. ¿Con qué frecuencia se debe ver afectado de forma permanente por los ojos del vulgar y la cruelda del impotente que se extendería la aflicción universal? – Mark Rothko.
22.enero.2014
Mark Rothko fue uno de los artistas americanos más famosos de la posguerra, y es considerado como uno de los más importantes pintores del ¨expresionismo abstracto¨ (etiqueta que rechazaba) junto a Jackson Pollock y Willem de Kooning. Su intención principal era que sus trabajos narren sin contar ninguna anécdota, centró su labor en el uso del color, y sus enormes lienzos envolvían a quien los contemplaba, y paralelamente a su vida, fueron cambiando de tonalidad (de una paleta de colores más vivos, a una más terrenal, para finalizar en una con tonos oscuros).
El punto de partida de RED es el momento en que Rothko acepta realizar una serie de murales para ¨decorar¨ las paredes del restaurant Four Seasons del flamante edificio Seagraman de Nueva York, cuyo encargo – de $35.000 dólares – lo convertía en el mayor en la historia del arte moderno.
Para que lo ayude en la tarea, contrata a un joven asistente – Ken – con quien irá tejiendo, casi sin quererlo, una relación de maestro/alumno, ya que el pintor irá ¨educando¨ al joven, sea expresando sus pensamientos e ideologías, o bien recomendado libros y autores para que lea, y luego puedan comentar.
Abocado en la tarea de lo que creía seria uno de sus trabajos maestros, cuyo fin era dejar una marca en un lugar clave del capitalismo, se irá dando cuenta – a medida que su asistente le empiece a cuestionar ciertas ideas – que tal vez aquello no será posible.
Con un texto provocador, profundo e intenso – escrito por el dramaturgo y guionista americano John Logan – es el retrato de un artista que busca generar una obra cumbre, a la vez que se enfrenta con sus demonios interiores, y contra una sociedad consumista, pero también, es sobre el vínculo que se establece entre el ayudante y el maestro, y la relación padre-hijo, mentor y discípulo, que adquieren, y como cada uno de ellos dejará una marca imborrable en el otro.
La dirección de Daniel Barone es acertada, y es interesante la composición – y comunión – que logran los trabajos de Jorge Ferrari (escenografía), Eli Sirlin (iluminación) y Mini Zuccheri (vestuario)
Julio Chávez es un actor inmenso, y su composición como Mark Rothko no es la excepción, utiliza una paleta expresiva llena de matices para dar forma a su personaje, dejando ver las distintas capas del mismo. Es imposible no sentir una atracción – cual imán – ante un trabajo exquisito, lleno de fuerza, ferocidad y sensibilidad.
A su lado se encuentra Gerardo Otero, quien se destaca en su tarea, haciendo que su personaje crezca paulatinamente, desde un primer momento de mayor timidez y fragilidad, hasta poder enfrentarse con presencia y fuerza escénica
Provocadora, intensa e inquietante, RED es un espectáculo mayor, con un magistral trabajo actoral de Chávez, en una obra intelectual y sensible a la vez, donde se habla del arte, del negocio, de lo popular y lo sagrado, sobre las nuevas generaciones, el paso del tiempo, los principios, y sobre la vida y la muerte.
¨Lo único a lo que le tengo miedo en la vida, es que un día el negro se trague el rojo¨
Martin Dichiera
En twitter @MartinDichiera