El Trece emite el primer capítulo de una de las ficciones más esperadas. Religión, muerte, astrología y la historia de un hombre aparentemente común que revelará al peor de los seres.
Julio Chávez volvió a El Trece con Signos, la nueva miniserie que promete atrapar a la audiencia con una historia de crímenes, suspenso y un costado místico: los signos como leit motiv de las muertes por venganza.
El capitulo comenzó presentando al personaje de Chávez, un médico querido de un pueblo, cuyo orden se verá desestabilizado por los crímenes en serie. La primera escena lo mostró yendo en ambulancia a curar a un hombre herido durante una peregrinación. «Yo también hice una promesa, curar a la gente», dice, paradójicamente, este hombre de aspecto común que esconde al peor enemigo.
«A mí déjame en la iglesia, eh», dice después, y pronto llegará al escondite donde tiene secuestrado al director del colegio. «Sos un charlatán, sabés de todo un poquito», le dice recriminándole su personalidad. «¿Leíste el horóscopo? Hoy vas a pagar lo que hiciste hace 46 años: te voy a matar, Rafael», advierte, y luego confiesa ante el cura del pueblo que mató a su hermano.
La sorpresa llega en otra escena: cuando se descubre que también mató al cura, y descubren a ambos en el altillo, abrazados, rodeados de sangre. El pueblo, en ese momento, enloquece.
Descubrir la psicología de este complejo personaje – que se desliza entre la cotidiana normalidad familiar y su secreto – será, sin dudas, uno de los grandes atractivos para el público.
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