Crítica de «Después de nosotros” : Muy buena
La obra escrita y protagonizada por Julio Chávez habla de la delicada situación de un padre con un hijo que tiene retraso madurativo. Va en el Paseo La Plaza.
Una de las mayores dificultades para quienes son padres y madres suele residir en encontrar ese delicado equilibrio entre soltar sin descuidar y cuidar sin sobreproteger. Cuando el hijo, además es un joven con retraso madurativo, ese desafío se potencia. En Después de nosotros, el planteo pasa por ese rol, puesto en jaque por una realidad ineludible. El texto de Julio Chávez y Camila Mansilla se instala en el pequeño círculo de unos vínculos muy cercanos: un padre, Juan (Julio Chávez), una madre Andrea (Alejandra Flechner) y un hijo Federico (Matías Recalt), que tiene 21 años pero con algunos comportamientos de alguien de menos edad.
A pesar de estar separados, Juan y Andrea funcionan como un bloque decidido a hacer la vida de Federico un poco más fácil y sin demasiados sobresaltos.
A ellos se les suma la presencia de una mujer, Mercedes, interpretada por María Rosa Fugazot, que cuida de la casa y tiene una relación fluida y amorosa con Federico desde su infancia. Y se sabe que un extraño dentro del círculo íntimo suele despertar resquemores. Sobre todo en Juan, que siente amenazada su autoridad y su rol paterno y hasta siente celos (aunque no lo demuestre abiertamente) por el cariño entre su hijo y ella.
En el devenir de la vida cotidiana, el tiempo pasa y no parece haber tiempo para detenerse a pensar en lo que duele o en lo que se teme. Pero, sobre todo en el personaje del padre es donde el miedo por el futuro de su hijo se hace carne. Aparecen los temores por ese hijo que, en algún momento, no tendrá la presencia de sus progenitores para seguir adelante en la vida de una manera más o menos amable. Y la responsabilidad por encontrar una salida a eso que es inevitable, se abre como una herida dolorosa.
Lo que pasará con nuestros hijos después de nosotros es una absoluta incógnita. Pero para Andrea, hay una posibilidad de confiar en lo que ambos construyeron como contención para su hijo. Ella tiene un punto de vista más optimista sobre lo que no puede controlar. Sin embargo, para Juan, la idea de responsabilidad parece sobrepasarlo y su desesperación termina afectando la relación actual con su hijo que, a pesar de su situación, intenta hacerse un camino propio y a su manera.
Chávez encarna a este padre con todos los matices posibles, pasando por la aparente frialdad para definir situaciones, la furia por no sentirse comprendido en su intento por darle a su hijo una red de contención ideal, hasta derrumbarse en una ternura que lo desborda y le permite desahogar un poco la angustia contenida.
Como coautor del texto, Chávez supo encontrarle la profundidad necesaria para despertar ternura y empatía por su intento, casi inútil, de resguardar a su hijo de los males del mundo.
Por su parte, Flechner siempre eficaz, es el equilibrio justo en una madre que intenta otro camino para ayudar a su hijo pero comparte en silencio el dolor con su ex.
Matías Recalt tiene sobre sus hombros la difícil tarea de darle verosimilitud a ese joven que actúa, por momentos, es casi un niño, pero que también lucha e intenta valerse por sí mismo. Varias de las escenas que comparte con Chávez dan justo en el blanco, por su ternura y emotividad.
María Rosa Fugazot aporta oficio y una cuota de humor a la historia, junto a Mariano Musó como el plomero, testigo involuntario del drama y que. sin querer, ayuda a ordenar pensamientos y emociones.
Con la dirección de Daniel Barone (especialista en manejo de actores), el espectador acompaña el dilema de estos padres con naturalidad, gracias al acierto de la puesta de no caer en golpes bajos ni dramatizar de más, e incluso sumar alguna cuota de humor al conflicto.
Después de nosotros se presenta en el Paseo La Plaza, con producción de Nacho Laviaguerre y Adrián Suar.
Ficha
Después de nosotros
Calificación: Muy buena
Dirección: Daniel Barone. Con; Julio Chávez, Alejandra Flechner, María Rosa Fugazot, Matías Recalt y Mariano Musó. Sala: Paseo La Plaza, Av. Corrientes
1660. De miércoles a domingos, a las 20.15.
Sandra Commisso
21/02/2020
Clarín.com